Nuestro punto de partida, fue desde Urkiaga (918 metros), donde comienza el GR11 que indica los distintos picos que se pueden afrontar.
La primera parte del camino está asfaltada, para continuar por una senda de tierra.
Después nos adentramos en un pequeño bosque de pinos inmensos.
A medida que ascendíamos, la vegetación se hacía más escasa. En todo momento, la subida estaba bien señalizada.
En la fecha en que realizamos la ascensión, a principios de enero, nos encontramos con rastros de la últimas nevada.
Ya en la cima, la vista es fantástica.
